Una pared pulcra,de losetas recien limpiada.Alguien con esmero se ha dedicado a sacar brillo a esta pared,que es como todas una pared sin importancia,pero que sujeta los hogares de unos pocos ciudadanos.
De repente,de la noche a la mañana un estigma brota de la pared.
Una herida hecha a conciencia por alguien que supedita su orgullo personal al respeto y al honor de cualquier otra persona.A conciencia y al olvido pues la cicatriz perdurará en el tiempo y el autor del daño permanecerá escondido de la cueva de la que un día decidió salir.
Una cicatriz marcada a fuego de tinta, con nocturnidad,al refugio de la oscuridad y al calor de unas copas previas.
Hasta los perros son mas discretos cuando marcan su territorio.
De repente,de la noche a la mañana un estigma brota de la pared.
Una herida hecha a conciencia por alguien que supedita su orgullo personal al respeto y al honor de cualquier otra persona.A conciencia y al olvido pues la cicatriz perdurará en el tiempo y el autor del daño permanecerá escondido de la cueva de la que un día decidió salir.
Una cicatriz marcada a fuego de tinta, con nocturnidad,al refugio de la oscuridad y al calor de unas copas previas.
Hasta los perros son mas discretos cuando marcan su territorio.
Si esta pared fuera el Muro de Berlin,tus ideas no serian mas que bloques rotos y si fuera el Muro de las Lamentaciones con esta oración no irías mas que al infierno.
Los hombres de las cavernas pintaban lo que veían,lo que cazaban y lo que creían.
Quizás este bicho que has dejado olvidado en esta pared represente en lo que crees y en lo que piensas.
En el fondo lo que eres.
Nada ni nadie.
Un mierda.
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